Endulzantes naturales alternativos

Muchos hoy en día saben que el azúcar blanca refinada producen daños irreparables a nuestra salud, es por eso que a continuación les presento las alternativas más saludables para endulzar nuestras comidas.

Panela o papelón: es la  jugo de la caña de azúcar cocido a altas temperaturas hasta formar una melaza densa que luego se deja secar hasta que se solidifica, viene en forma de bloque o cono es producido en varios países de centro y sur América; es de color marrón oscuro.

Ciertas marcas venden azúcar de caña o de panela la cual es marrón bien, bien oscuro conocida por algunos como azúcar morena o negra y puede que sea la panela granulada (pero lo mejor es leer bien la etiqueta).

Ojo! También ocurre que algunos empaques que dicen Azúcar Mascabado o Demerara, las cuales muchas veces son azúcar blanca procesada (menos granulada) a la que le agregan jarabe de caña en su proceso final, (de ahí su color castaño) por lo que si agregas una cucharadita de ésta a un vaso de agua, verás como pierde poco a poco el color y sólo quedan los micro granitos de azúcar blanca), así que pendientes con eso…?

Azúcar de coco: está de moda hoy en día y es muy buena para cocinar a altas temperaturas (como hornear) o simplemente para endulzar el té, el café o  jugos naturales.

Miel: buena para endulzar bebidas cálidas o frías pero no para cocinar a altas temperaturas u hornear porque se oxida y se vuelve tóxica.

 

Jarabe de arce: o en inglés «maple syrup» un tanto costoso pero vale la pena porque con éste si se puede cocinar a altas temperaturas o para preparar salsas agridulces o como sustituto del caramelo en recetas de postres.

Dátiles o en su defecto uvas pasas, sin embargo los primeros son sin duda una excelente opción para endulzar mezclas de bizcochos, tartas u otros preparados para hornear o también para endulzar batidos de frutas.

 

Jarabe de stevia: se obtiene al hervir las hojitas de esta planta con agua, sólo que es un tanto amargo. La stevia en polco que se consigue en todos los supermercados es procesada, por tanto pierde toda sus propiedades y al igual que el jarabe deja un sabor amargo al final.

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